Se podría decir que la usabilidad web, del inglés «usability», se ve afectada por las decisiones estructurales de diseño, configuración y programación. Esto es así tanto si se realizan interfaces desde cero, como utilizando frameworks o CMS para crear páginas web o aplicaciones interactivas. El concepto ha venido popularizándose en los últimos años, especialmente con la entrada en acción del diseño web responsive y la fiebre del SEO.
La usabilidad web influye en la asimilación de los procesos comerciales a través de la navegación. Atañe a todo tipo de factores relacionados con el diseño web y el rendimiento de los diferentes elementos. En general, a todo lo que podría formar parte de una suite de características deseables para favorecer la interacción.
Vamos a ver con más detalle en qué consiste la usabilidad web y qué tipo de técnicas se aplican para mejorarla. Y también sus principales beneficios. Descubrirás que en su conjunto, se trata de cuestiones de sentido común.
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¿Qué es la usabilidad web?
Aunque hay mucho de qué hablar en lo que a usabilidad se refiere, en esta publicación vamos a centrarnos en lo más importante. El concepto de usabilidad está íntimamente relacionado con la experiencia de usuario. Alcanza sus máximas cotas de protagonismo en proyectos web complejos, como por ejemplo la creación de una tienda online.
La usabilidad pone el foco en la relación entre el usuario y la plataforma. Se trata de una propiedad de algunos sitios web que permite que los visitantes interactúen de la manera más fácil e intuitiva posible. Les ayuda y facilita encontrar lo que buscan. En el contexto del diseño web y las estrategias de marketing online se trata de algo muy importante. Es uno de los recursos principales que un sitio web utiliza ventajosamente para tener éxito.
Para conseguir implementar satisfactoriamente los conceptos relacionados con la usabilidad es necesario basarse en una experiencia centrada en el propio usuario. Los diseñadores web y programadores deben ponerse en la piel de las personas que visitarán el sitio web o la App. Tendrán que tomar decisiones basadas en sus posibles interpretaciones y respuestas ante cualquier elemento compositivo.
¿Cómo conseguir una mejor usabilidad web?
Garantizar una buena usabilidad en cada página o interfaz de usuario, conlleva recorrer, antes de su lanzamiento, todos los caminos dispuestos para el usuario. Verificar la viabilidad en términos funcionales y comprobar los enlaces rotos para evitarlos, entre otras muchas cosas.
Un diseño usable permitirá encontrar cualquier contenido en la web de manera fluida, con el menor número de clics. Uno de los factores más importantes para estimar el nivel de usabilidad es la capacidad para situar delante del usuario lo que está buscando. Hacerlo en un tiempo mínimo y sin problemas de rendimiento que ocasionen retrasos e interrupciones. Se busca efectividad eficiencia y satisfacción.
Es fundamental la correcta jerarquización de los elementos y símbolos dispuestos para la navegación. Esto afecta directamente a la estructura de las páginas web organizadas en menús, categorías y subcategorías. La coherencia entre ambos aspectos facilita al usuario el entendimiento, valorar las opciones de las que dispone.
También hay que poner atención a la usabilidad móvil o respuesta del diseño en dispositivos móviles. Una parte muy importante del tráfico actual fluye a través de terminales de este tipo. La experiencia de navegación en ellos tiene que ser buena. Piensa en cuántas veces abandonaste una página web con el móvil dándola por imposible.
Testeo y pruebas de usabilidad
Existen unos principios de usabilidad y una serie de reglas de usabilidad básicas que hay que respetar. Se pueden realizar análisis de usabilidad para realizar comprobaciones y detectar diferentes problemas de usabilidad. Los test de usabilidad presenciales y online son muy útiles para saber dónde hacen click los usuarios con mayor frecuencia. Y los mapas de calor ponen en evidencia los puntos de interacción más utilizados.
A veces, aspectos funcionales durante las etapas de desarrollo web arruinan la experiencia a pesar de disponer de una navegación bien optimizada. También hay casos en los que los motores de búsqueda internos no son suficientemente potentes para devolver resultados en un tiempo razonable. O en los que determinados módulos y componentes no brindan acceso a la información de manera ágil. En ello juegan un papel importante las características de los planes de alojamiento y las prestaciones de los servidores. Todo influye en la velocidad de carga de las páginas, y en los recursos tecnológicos para la gestión de las bases de datos.
Beneficios de una plataforma web usable
Una usabilidad web correcta y con una arquitectura de la información bien estudiada trae muchos beneficios. Entre ellos destacamos los más importantes:
- Mayor tiempo de permanencia en el sitio: Una página web con la usabilidad optimizada retiene mejor el tráfico que otra en la que es difícil navegar.
- Penalizaciones de Google: Google penaliza aquellos dominios cuya usabilidad y capacidad de respuesta no estén optimizados para el usuario. Esto tiene diferentes consecuencias en el SEO de cara al posicionamiento.
- Aumento de las conversiones: Las páginas usables convierten y venden más. No hay nada tan desesperante que tratar de informarse o completar un proceso de compra en una web complicada. Algunos diseños lo ponen difícil proponiendo demasiados caminos alternativos en función a su embudo de captación y ventas.
- Visitantes recurrentes: Los sites que disfrutan de una buena usabilidad web muestran una tasa de retorno del tráfico mayor. Si un visitante disfrutó en la anterior visita es muy probable que vuelva.
Conclusiones
En definitiva, contar con un medio con una buena usabilidad puede marcar la diferencia entre el éxito o el fracaso de un negocio en Internet. Es importante revisar los puntos de interacción para tratar de mejorar mirando con los mismos ojos con los que lo haría el usuario.
La razón de ser que definió la usabilidad y por la que tiene sentido es siempre ayudar al usuario. Debe existir una facilidad de aprendizaje en los procesos para resolver problemas específicos con efectividad. Esto refiere a la capacidad del ser humano para empatizar con las necesidades de los otros.
