Si bien es cierto que no todas las personas tienen madera emprendedora orientada a los negocios, también es verdad que en el marco socioeconómico actual y poniendo como ejemplo la economía Española con una gran cantidad de personas en situación laboral de paro, las posibilidades de encontrar trabajo a veces se reducen casi a la sucesión de un milagro, al apadrinamiento o al enchufismo.
Esto sumado a que en la mayoría de los casos la obtención de un empleo suele dejar de satisfacer nuestras expectativas a corto o medio plazo por diferentes motivos, como el salario insuficiente, el formato en el desempeño de las funciones o la estúpida e improductiva competitividad que se genera entre los empleados, el hecho de seguir enviando currículums se convierte en algo digno de poseer una moral altiva similar a la del Alcoyano.
Para los que no tienen padrino, ni la posibilidad de invertir mucho dinero en iniciativas seguras en cuanto a su rentabilidad o en la compra de activos, lo más prudente es cambiar el chip y empezar a enfocar los esfuerzos en ofrecer algún servicio para comenzar a percibir ingresos en el mínimo plazo de tiempo posible.
Para la mayoría de los profesionales independientes o pequeñas empresas, desarrollar una presencia digital debería ser una de las prioridades, empezando por disponer de un sitio web moderno y funcional como unidad de negocio, para posteriormente construir un plan de marketing online con el que poder promocionar sus servicios entre su público objetivo.
Hay mayores posibilidades de que estos esfuerzos den su fruto para pasarse al otro lado en el momento oportuno, el de convertirse en empresario individual o asociado, para gestionar una actividad o empresa propia por pequeña que sea, ya que por el transcurrir de los tiempos parece la apuesta más segura.
Ofrecer tus servicios profesionales es una estupenda alternativa.
Los tiempos apuntan al cambio, y ese cambio conllevará seguramente en el futuro a una mejora de las condiciones para emprender en cuanto a medidas fiscales, ya que se hace necesaria una reactivación de la economía, que con tanto recorte y austeridad parece no llegar a ninguna parte.
Aunque el camino del autoempleo tampoco es fácil desde el principio, se diferencia de buscar trabajo por cuenta ajena en algunas ventajas, y es que desde el primer momento en el que se realizan acciones para poner en marcha el proyecto, la siembra es para recoger la cosecha y obtener el reconocimiento y beneficios sobre nuestra marca de carácter representativo o personal.
Una cosa es segura, como en todo, las posibilidades aumentan proporcionalmente al esfuerzo, con la ventaja de poder aplicar nuestro criterio en beneficio de la productividad, tratando de descubrir o poner en marcha un modelo de negocio repetitivo y escalable, al contrario que el condicionamiento y estanqueidad que supone en la mayoría de los casos la obtención de un empleo.
Cada vez tiene más sentido trasladar nuestra experiencia a tratar de impulsar iniciativas propias, aprendiendo de nuestros errores en base al desarrollo de nuestra actividad, hacernos visionarios y realistas, capaces de afrontar un amplio espectro de situaciones, con la sensibilidad para valorar numerosos matices que trabajando en la empresa de otros pasarían desapercibidos.
Emprender te obliga a estar al día en tu especialidad, a actualizarte y adaptarte al cambio, pero sobre todo a experimentar la apasionante sensación de perseguir objetivos y a ilusionarte por los resultados obtenidos.
En IngenioVirtual apoyamos las iniciativas emprendedoras, te animamos y ayudamos a construir tu identidad digital y online adaptando nuestros servicios a tus recursos, creemos en las personas y en sus ideas, en la economía colaborativa y en la generación de riqueza y progreso empezando por la autosuficiencia, ¿necesitas un sitio web, grafismo y contenidos, o quizás aprender a promocionarlos?, ponte en contacto.
